Este es uno de mis postres preferidos. Y también mi receta favorita de tarta de queso. Mucha gente la hace sin horno, con leche o nata, etc. Pero a mí me encanta esta receta con yogur y hecha en el horno. Creo que queda mucho más cremosa. Además, agregando esa cucharada de azúcar moreno en la base de galletas queda mucho más crujiente y buena.
Ingredientes
(Para 4 personas)
- 125g de queso de untar
- 1,5 yogures naturales
- 2 huevos
- 2 cucharadas de maicena
- 4 cucharadas de azúcar blanco
- Para la base:
- ½ paquete de galletas tipo Digestive
- 1 cucharada de azúcar moreno
- 25g mantequilla
- Para la superficie:
- Mermelada de arándanos
- 100g de arándanos frescos o congelados
- 1 cucharada de azúcar
- 1 cucharada de agua
- ¼ de lámina de gelatina neutra
- Coulis de fresa (opcional):
- 70g fresas
- 20g grosella
- 35ml agua
- 50g azúcar
- 1 trocito de lámina de gelatina neutra
Elaboración
- Empezamos preparando la base de galleta. En el vaso grande de la batidora trituramos la mantequilla con las galletas y la cucharada de azúcar moreno. Si son demasiado dulces las galletas que vais a utilizar podéis ponerle la mitad de azúcar. Aunque el objetivo de utilizar el azúcar moreno es que quede la base con un toque crujiente.
- Forramos el molde que vayamos a usar y hacemos la base de galleta. Lo horneamos 5 minutos.
- Mientras tanto, en un bol mezclamos con unas varillas a mano o con la túrmix el queso con el yogur.
- A continuación, añadimos los huevos y el azúcar blanco.
- Por último, añadimos la maicena tamizada.
- Cubrimos la base de galleta con esta mezcla y horneamos durante 35-45 minutos a 180ºC (o hasta la prueba del palillo).
- Mientras se hornea, vamos a preparar un coulis de fresa y grosella y una rápida mermelada de arándanos.
- Para el coulis de fresa empezamos preparando un almíbar. En un cazo pequeño ponemos 100ml de agua y 120g de azúcar blanco juntos y lo llevamos a ebullición. Cortamos el rabillo de las fresas y las lavamos junto con las grosellas. Vertemos el almíbar en la fruta, dejamos reposar 5 minutos para que se empape y trituramos. Colamos y colocamos en otro cazo. Llevamos de nuevo a ebullición y añadimos ¼ de lámina de gelatina neutra, previamente hidratada. Damos un par de vueltas y reservamos.
- En otro cazo pequeño ponemos los arándanos, previamente lavados, con una cucharada de azúcar y otra de agua. Cocinamos 5 minutos y añadimos la gelatina, previamente hidratada.
- Dejamos enfriar el pastel de queso, ponemos 3 cucharadas de coulis de fresa y cubrimos con la mermelada de arándanos.
Notas
Si os ha sobrado un poco de coulis o mermelada podéis
aprovecharla para comerla con un yogur natural! Está delicioso!
La mermelada la podéis hacer de lo que queráis: fresa, frambuesa, grosella etc.
Las galletas de la base, cuanto más sosas mejor. Yo utilicé unas que me compré en un arrebato por comer ¿mejor? y que no sabían a nada. Pues son perfectas para este tipo de recetas (A ver si me las saco de encima ya)! jaja Si utilizais unas tipo María, podéis agregar un poquito de avena y frutos secos picados para que no quede una masa blandurría y sin gracia.
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