Para que nuestras células puedan seguir trabajando en nuestro organismo correctamente, necesitamos proteínas!! Bienvenidos al combate entre la proteína animal y vegetal!
Ahora que ya tengo vuestra atención, os explico cuatro cosillas de las proteínas. ¿Por qué son tan importantes? Las proteínas forman parte de la estructura
básica de los tejidos (músculo, piel, uñas, etc.), desempeñan funciones
metabólicas (asimilación de nutrientes, transporte del oxígeno y de la grasa en
la sangre, etc.) y son la base de la estructura del ADN y de los sistemas de
reconocimiento de cuerpos extraños en el sistema inmunitario.
¿Y qué es una proteína? Las proteínas
son moléculas grandes constituidas por
aminoácidos. Para poder asimilar las proteínas, éstas tienen que
descomponerse en los distintos aminoácidos que la conforman en el intestino y en el estómago.
El ser humano necesita 22
aminoácidos, pero hay 9 que no es capaz de sintetizar por sí mismo. Son los
denominados aminoácidos esenciales. ¿Y
qué hacen? Si falta uno esencial, no podrá sintetizar ninguna de las proteínas
en las que sea requerido.
Empezamos!
Las proteínas de origen animal son
más grandes y complejas, ya que contienen una cantidad mayor de
aminoácidos. De hecho, el conjunto de los aminoácidos esenciales sólo está
presente en las proteínas de origen animal. De esta manera, el valor biológico de la proteína animal
es mayor que la vegetal. Sin embargo, si combinamos
las proteínas vegetales, por ejemplo, legumbres con cereales, obtenemos proteínas de mayor calidad biológica.
Además, las proteínas animales son
más difíciles de digerir que las
vegetales, ya que hay un mayor número de enlaces entre los aminoácidos y
cuestan más de romper. En cambio, el aporte
proteico neto de las proteínas vegetales es mayor por asimilarse mucho
mejor en nuestro sistema digestivo.
Cuando consumimos carne, también
ingerimos los desechos del metabolismo
celular del animal. Como ácido úrico, amoníaco, etc. Que el animal no pudo
eliminar de su organismo antes de ser sacrificado.
La proteína animal, especialmente
la de la carne roja, suele tener
grasas saturadas. Si ingerimos una elevada cantidad de ácidos grasos saturados tenemos más riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
¿Quién gana el combate? Pues
haciendo una dieta sana y equilibrada,
donde primen las proteínas vegetales
combinadas y a la vez consumamos una
pequeña parte de proteínas animales (de mayor valor biológico por sí solas),
podríamos decir que quedan en empate. En general, se recomienda que sólo una
tercera parte de las proteínas que ingerimos sean de origen animal.
Chiqui proteína vegetal vs Chiqui proteína animal |
Eso sí, si disminuimos el consumo de
carne cada uno/a, también le hacemos un favor al planeta. Pero, eso ya lo
comentamos otro día. Que si os habéis quedado con ganas de un ganador porque sois muy competitivos, os digo que la vegetal eh jejeje
A comer lechuga conejos!
Cara de un español carnívoro medio |
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